Los cambios de versiones de los sistemas reconocidos por GFSI ( IFS FOOD 7, BRC 8, FSSC 22000 5), acompañan a la entrada en vigor del Reglamento 625/2017 de Controles Oficiales de la UE (14/12/2019) que, entre otras cosas, implica una evolución y compromiso por parte de Europa en la mitigación/prevención del fraude alimentario. A su vez, tampoco podemos olvidar el Reglamento 627/2019 y 624/2019 sobre productos de origen animal.
Enfocándonos en lo más importante
En KPI Agroalimentaria trabajamos bajo el enfoque de Food Integrity, que incluye Food Safety (basado en APPCC), Food Defense y Food Authenticity. Los sistemas reconocidos por GFSI están reforzando el papel Humano de los sistemas y persiguen trabajar en la mejora continua y promoción de una cultura de inocuidad alimentaria. Este año, nosotros trabajamos en las empresas para conseguir este objetivo, a través de un plan de acción basado en indicadores de control clave para evaluar la eficacia conjunta del sistema.
La revisión de los indicadores clave de control de calidad, RRHH, mantenimiento y producción, nos permiten conocer y mejorar la relación entre estos departamentos, y si a esto añadimos el entrenamiento en competencias clave directivas y sociales, conseguimos mejorar la capacidad de comunicación, compromiso e implicación de las figuras clave y del resto del equipo. La capacitación específica es fundamental y en KPI Agroalimentaria somos centro oficial autorizado para impartir formación específica reconocida por IFS.
Control de los materiales y alimentos
Por otro lado, cobra especial atención el control los materiales en contacto con los alimentos (FCM), de modo que se pide capacitación en materia de etiquetado, envases y embalajes para las figuras clave implicadas. Es conveniente ver los cambios de BRC Pack 6.
Otra de las normas de IFS que ha cambiado es IFS BROKER V3 que entra en vigor a partir de enero del 2020, siguiendo con la actualización de los diferentes estándares y reforzando la prevención del fraude a lo largo de toda la cadena-
Para aquellos, cuyo producto es de origen animal, la entrada en vigor del Nuevo Protocolo SAE (1/7/2019) también ha supuesto una adecuación del sistema y en 2020 seguiremos dando apoyo a las empresas.
Bienestar animal
En materia de Bienestar Animal, seguimos de cerca todo lo que están trabajando las intersectoriales de la producción animal, como lo es el gran esfuerzo de INTERPORC con la publicación del Reglamento de Bienestar Animal y Bioseguridad (IAWS), estamos trabajando en la formación para explotaciones, transporte y mataderos.
Producción responsable
Finalmente, además de seguridad alimentaria, prevención del fraude, exportación y bienestar animal, el sector agroalimentario se enfrenta a un reto integrador: producción responsable, que estamos abordando directamente con las empresas, siguiendo las directrices del Ministerio (REDSOSTAL/ESIAB ) en materia de sostenibilidad. Entre los temas que estamos trabajando destacamos: diagnóstico de requisitos legales de medioambiente para la industria alimentaria, y de responsabilidad social corporativa. También estamos abordando la sostenibilidad económica de la industria alimentaria, de este modo conseguimos una visión global del sistema (objetivo 12 Europa).
Todo ello, está suponiendo un cambio significativo de los diferentes eslabones de la cadena hacia la calidad total en todos los procesos que se llevan a cabo, y profesionalización del personal implicado, con herramientas como la capacitación específica.
Retos Sistemas de seguridad alimentaria
Las empresas del sector alimentario deben prepararse durante este 2020 a los nuevos retos que están surgiendo y que hace que debamos estar al día en determinados aspectos, algunos nuevos para muchas de ellas.
Tras las novedades aparecidas en las últimas versiones de las Normas de Seguridad e Inocuidad Alimentaria como BRC, FSSC y próximamente la nueva IFS, parece que se está produciendo un avance significativo en las necesidades del sector agroalimentario que obligará a muchas empresas a realizar cambios en su sistema si no quieren quedarse atrás.
No sólo se busca la seguridad alimentaria, el consumidor reclama además que el producto que se va a consumir se haya obtenido mediante una producción eficiente y responsable. Aparece por tanto el concepto llamado Food Integrity Plan, del que hablábamos anteriormente.
Centrándonos en la seguridad alimentaria, tenemos conceptos nuevos que aplican a todo el personal de la empresa como son la cultura de seguridad e inocuidad alimentaria y el canal de denuncias efectivo. Conceptos que conllevan un cambio en la mentalidad del trabajador y una mayor implicación por su parte hacia la actividad de la empresa.
Por otro lado, se van a pedir mayores exigencias en aspectos ya conocidos por las industrias agroalimentarias. Podemos hablar, por ejemplo, de una actualización permanente de la legislación aplicable a la empresa, un adecuado control de los eslabones de la cadena de suministro (desde el productor hasta el consumidor) o el uso de envases seguros (donde, de manera indirecta, debemos incluir cualquier superficie que esté en contacto con alguna materia prima, ingrediente o producto final).
Jornada Retos del Sector Agroalimentario 2020
En nuestra primera jornada contamos con la colaboración de Ignacio Chapa, Jefe de Sección de Gestión del Riesgo Alimentario de Salud Pública, y de FEDACOVA, a través de su adjunto a dirección, Juan José Rico.
Nuestro compañero Juan Miguel Montero de Espinosa habló sobre las novedades en sistemas de seguridad alimentaria y Eva Núñez Román, responsable de desarrollo del sector agroalimentario en KPI, nos contó más de Food Integrity Plan, modelo de producción basado en la eficiencia, la seguridad y la responsabilidad social corporativa.
Con esta breve introducción, vemos que queda mucho camino por recorrer para lograr la satisfacción plena de un consumidor cada vez más comprometido y exigente. A través del proyecto de desarrollo profesional del sector alimentario, trabajamos para ayudaros y daros cobertura en seguridad alimentaria, prevención del fraude, sostenibilidad, exportación, bienestar animal y mejora continua a través de un plan de acción integrado e indicadores clave de control.